La formación de la inteligencia emocional de los niños debe de ser de preocupación de los padres desde el nacimiento de los pequeños, ya que desde el primer mes esta se empieza a formar.
La inteligencia emocional se verá moldeada, poco a poco, mediante la metodología Montessori ya que enseña al niño a aprender por su cuenta y a su ritmo; dejando enseñanzas de paciencia, respeto, trabajo en equipo, entre muchas otras.
¿Qué es la inteligencia emocional?
La inteligencia emocional ha sido un término que ha tomado relevancia desde los 90s, gracias a Daniel Goleman, debido a la importancia de las emociones en coalición con la inteligencia: es la capacidad de reconocer las emociones propios y de los demás, haciendo a la persona hábil para manejar sus sentimientos.
Esta habilidad se caracteriza por 5 capacidades básicas: descubrimiento de las emociones, reconocimiento de las mismas, manejarlos y poder crear una motivación propia para, finalmente, gestionarlas en las relaciones personales.
Las emociones de los niños
Siempre llega esa ocasión en la que pensamos que nuestros hijos se la viven enojados, dispersos, demasiado alegres, o hasta tristes: que se vea así no significa que realmente se sientan de esa manera: puede ser una reacción opuesta a como se sienten; si están tristes puede que parezca que su sentir es enojo debido a la manera en la que actúan. Es por ello que el cultivo de una inteligencia emocional mediante la educación es importante, y el método Montessori puede jugar un gran papel en esto.
La forma de enseñar Montessori permite que los niños tengan una manera de reconocer cómo se sienten mientras aprenden temas de la escuela, todo a su paso: como una manera de autodescubrimiento y autodidactismo.
¿A qué edad empiezan a desarrollarse?
Los niños empiezan a desarrollar su inteligencia emocional desde que llegan al mundo, desde el primer mes, poco a poco comienzan a desarrollar sus sentimiento, y por lo tanto a reconocerlos. Conforme maduran, los niños manifiestan nuevas emociones que conforme pasa el tiempo tratan y logran manejar, es importante que conforme pase todo esto tengan compañía para calmarlos y guiarlos si es necesario.
Por ejemplo, en el primer año se empiezan a manifestar las distintas emociones humanas; emoción, placer, desagrado, rabia, disgusto, tensión, miedo, humorismo, alegría, entre otras. De la misma manera, y a la par, se desarrolla habilidades de comunicación y entendimiento del entorno.
Cómo ayudar a que se desarrollen bien las emociones de los niños
A pesar de ser algo interno de los niños, las emociones pueden ayudarse a desarrollar mediante la educación Montessori ya que gracias a su manera de enseñar a los niños, dándoles las herramientas necesarias para crecer y aprender. Debido a que mediante sus habilidades de autodidactismo aprenden a compartir, respetar y ser pacientes con otros al momento de realizar sus actividades de estudio.