Cada día, tu pequeño o pequeña aprenden algo nuevo y se desarrollan de manera mental y física, por lo que estamos seguros de que estás de lo más orgullosa u orgulloso por sus logros; el comer o vestirse solo y el ofrecerse a ayudarte hasta en las cosas más mínimas, todo eso es parte de su aprendizaje.
Por otra parte, a tu hijo o hija aún le esperan muchos años de desarrollo y aprendizaje tanto mental, física y emocional, según María Montessori a través de muchos años de investigación, llegó a la conclusión de que el ser humano pasa por varias etapas desde el nacimiento hasta llegar a los 25 años en las que aprende y absorbe conocimiento para toda la vida. Esto quiere decir que lo que hoy aprenda tu bebé, impactará su manera de desenvolverse en el futuro.
LAS ETAPAS DE DESARROLLO
Antes, quisiéramos contarte un poco más sobre quiénes definieron las etapas de desarrollo. Erik Erikson fue un psicoanalista estadounidense que contaba con estudios y certificaciones del método Montessori. Sin embargo, no fue un niño formado con dicha filosofía y metodología.
Él y María Montessori trabajaron juntos y dedujeron que los niños y las niñas pasan por diversas etapas para su correcto crecimiento y desarrollo. Sin embargo, se basaron más en la espiritualidad de los niños. A continuación te mencionamos cuáles son:
- Etapa Oral
Desde el nacimiento hasta el primer año, tu bebé comienza a ganar una confianza básica de su propio entorno, conoce donde vive, donde duerme y quienes lo rodean.
Además, durante esta etapa tu pequeño o pequeña muestra demasiado interés por los conceptos más básicos y los transforma en un conocimiento propio. Por ejemplo: meterse objetos a la boca, interesarse en el agua, arena o tierra, hacer movimientos con sus manos y piernas, puntual interés en objetos pequeños y demandar un apego a su mamá.
- Etapa anal
A partir del primer año y hasta los 3 años, tu hijo o hija comenzará a adquirir un autocontrol en sus movimientos, una autonomía en sus decisiones y comenzará adquirir fuerza de voluntad.
Durante esta etapa, sentirá una gran atracción por objetos en los que hay que meter y sacar cosas, como cubos de figuras geométricas. Al igual, presentará un interés por los objetos pequeños y las sensaciones que el agua o la tierra le brindan. Al tener más control y fuerza de voluntad de su cuerpo, comienza a gatear y posteriormente comenzará a caminar.
- Etapa genital
A partir de los 3 y hasta los 6 años, verás que tu pequeño o pequeña adquiere confianza en sí mismo, logrando tener liderazgo e iniciativa en actividades dentro de su entorno, por ejemplo: ofrecerse a ayudar en el hogar, dirigir y repetir ejercicios o actividades de manera muy puntual.
Además, durante esta etapa tu pequeño aprende a respetar los límites claros que se le indiquen, sentirá la necesidad de socializar y convivir con niños de diferentes edades.
Por otra parte, en este período de tiempo, comienza a conocerse a sí mismo y a su cuerpo, por lo que es común ver que en ocasiones puedan tocarse sus partes íntimas sin ningún tipo de maldad, es importante explicarle sobre su cuerpo y llamar a todo por su nombre.
- Etapa de la industria
A partir de los 6 y hasta los 12 años, tu hijo o hija sentirá un gran interés por crear, por lo que comienza a desarrollar una gran creatividad e innovación en sus actividades. Por ejemplo: explorar y experimentar con su entorno, leer, escuchar historias, hacer deporte y manualidades.
Es aquí donde la Dra. Montessori concluye el desarrollo del pequeño/a diciendo que en la vida siempre se aprenden conocimientos. En dichas etapas de desarrollo es cuando se forma la mente y la personalidad de cada individuo.
Para que estas etapas se desarrollen al 100% en tu pequeño o pequeña, es imprescindible que le brindes una educación con todas las herramientas necesarias que exploten todo su potencial, como lo es la metodología Montessori donde desde las primeras fases del desarrollo se le brindan materiales diseñados científicamente para desenvolverse según sus necesidades de aprendizaje dentro de un ambiente preparado para su correcto desarrollo para que en su futuro sea un ser capaz de realizar todo lo que se proponga.