La filosofía Montessori encuentra su razón de ser en que los niños interactúen vivamente con el entorno que los rodea. El que manipulen los objetos de su entorno tiene efectos positivos y directos en el aprendizaje del menor ya que el método busca estimular el uso de razón a través de la experiencia sensible.
Parte importante de este método es que los niños aprendan jugando, de hecho, es esto tan importante que constituye uno de los seis pilares de la enseñanza Montessori.
“Jugar aprendiendo, aprender jugando”
Los niños tienen una necesidad innata por jugar, esta necesidad viene de impulsos que llevan al menor a interactuar con los objetos que le rodean. Dicho de otra forma, los niños tienen una curiosidad incontrolable, misma que debe de ser estimulada como parte muy importante en el aprendizaje de los niños.
Como dijimos antes, los juegos son espontáneos, por lo que, como padre, es importante que los permitan y los estimulen al ser estos parte importante del desarrollo de sus hijos.
En un estudio publicado por la revista Child Development, se comparó el comportamiento escolar de un niño al que se le estimulaba fuera de la escuela con uno que no se le dan mayor cantidad de estímulos de este tipo. Los resultados, como era de esperar, arrojaron que hay un impacto directo entre el rendimiento dentro del aula de acuerdo al grado de estimulación: el niño que recibía en mayor medida este tipo de estimulación presentó un mejor desempeño escolar que el otro que recibía menos estímulos.
Qué tipo de juegos benefician más al aprendizaje de tus hijos
Dentro de los juegos que se apegan más al métodos Montessori existen algunos que si tenemos un poco de tiempo libre, son muy fáciles de aplicar en nuestro hogar.
Aunque existen muchísimos juguetes en las tiendas que se adaptan perfectamente a la filosofía Montessori, también existen muchas formas de crear tus propios juegos con cosas que encuentras en tu casa cotidianamente, entre algunas de estas actividades están:
Recolecta tus botellas
Aunque esto parecería un consejo de reciclaje (no descartamos que puedas hacer esto con tus botellas posteriormente), guardar las botellas plásticas que utilizaste puede ser una actividad muy beneficiosa para tu hijo. Para este juego procura recolectar botellas de diferentes tamaños y formas; la idea es que una vez las tengas les quites las tapas y se las des al niño para que él selecciones la tapadera adecuada para cada botella. De esta forma sus habilidades cognitivas se irán desarrollando más rápidamente.
Aprende texturas con trapos
Junta diferentes trapos y pedazos de tela que tengas en tu casa y siéntate a tu hijo a identificar las diferentes texturas; pídele por ejemplo que junte aquellos que tengan texturas similares y los organicen. Esto lo capacitará para la resolución de todo tipo de problemas durante su crecimiento.
Lo importante de lo anterior es que al llevar a cabo este tipo de “juegos” dentro de nuestro hogar, los pequeños no lo ven como una obligación o una tarea que deben cumplir, si no como algo entretenido en lo que pueden divertirse mientras se preparan para diferentes problemas. El sistema Montessori basa su filosofía en que quienes reciban la educación se sientan parte viva de el mundo que les rodea. El juego, además de ser el pasatiempo favorito de todos los niños, es experimentar los objetos que los rodean de manera viva.
