Como padre o madre es normal que te preguntes cómo tu hijo o hija adolescente puede sacar el máximo provecho a su educación y qué escuela podría funcionar mejor para ellos o ellas.
Las y los adolescentes pasan por una etapa emocionalmente muy compleja y hay que ponerse en sus zapatos para entenderlos.
Ellas y ellos presentan dudas, incertidumbre, separación, desilusión, miedo, pero sobre todo y a pesar de todas estas emociones, siempre está latente la posibilidad de transformación.
Desde el punto de vista biológico, la adolescencia es la adquisición de nuevas funciones fisiológicas y desde el punto de vista psíquico la adquisición de nuevas representaciones y afectos que le permiten a los jóvenes explorar nuevas posibilidades.
Esta es una etapa de transición desde la vida infantil hasta la vida adulta. Se consolidan las funciones ejecutivas del cerebro, por lo que los adolescentes necesitan hacerse cargo de su persona, además de vivir otras experiencias para madurar.
Un voto de confianza para tu hijo o hija adolescente
Considerando todos los cambios por los que pasan los jóvenes durante esta etapa, ellos no solo necesitan de tu afecto y comprensión ahora más que nunca. También necesitan que creas en ellos, que lo ayudes a reforzar sus destrezas y que deposites en sus manos toda tu confianza.
Los adolescentes necesitan una escuela que confíe en su ingenio y capacidad de transformación. Para ellos es sumamente positivo formarse en una escuela que no le tema a disentir, que esté dispuesta a escuchar lo que el joven o la joven tiene que decir, con interés y paciencia. Una escuela que acepte la diversidad y promueva la cooperación con la educación multigrados.
La escuela para adolescentes debe permitir y respetar las expresiones que conllevan a la búsqueda de la identidad. Promover muchas actividades físicas, que aprendan a través de la experiencia directa y fortalecer el trabajo intelectual no son objetivos que se logran mientras tu hijo o hija están sentados frente a un pizarrón. Esta actitud pasiva difícilmente promueve el cambio.
Para hacer de los adolescentes personas activas, que fortalezcan sus habilidades en la experiencia y el razonamiento, es necesario enfrentarlos de forma proactiva y creativa a los retos que suponen las actividades cotidianas. Recuerda que en esta etapa tienen mucho que aprender para después pasar a la vida adulta.
Una escuela que promueva conquistas de independencia y autonomía a través de la planeación y ejecución de proyectos que los lleven a obtener recursos intelectuales, sociales y económicos, es la institución perfecta para tu hijo o hija.
Montessori es una pedagogía que se basa en las características físicas, psíquicas y sociales de la etapa de desarrollo (en este caso la adolescencia), para adaptar a ella los métodos más convenientes que enriquezcan el carácter, el criterio y el ingenio de los jóvenes.
A partir de las necesidades y características de cada adolescente se presentan las alternativas más convenientes de trabajo, en las cuales además se promueve un estilo de vida saludable, así como desafíos típicos de la vida cotidiana que ayudarán a los jóvenes a crear sentido de responsabilidad, a desenvolverse con seguridad ante la toma de decisiones y a poner a prueba su ingenio.
La secundaria Montessori trabaja constantemente en el desarrollo de alternativas formativas, como:
- Actividades físicas con labores de cultivo, cuidado de animales, transformación o preparación de diferentes productos.
- Planeación y administración de proyectos que les reditúen económicamente.
- Deportes.
- Actividades artísticas.
La transición y consolidación de la vida adulta depende de los éxitos, fracasos, del trabajo y esfuerzo realizado. Depende de la capacidad de elaborar e interpretar las experiencias, los afectos recibidos. Todo se entreteje para configurar la historia de placeres, pareceres, desvelos, ilusiones, desilusiones… emociones que se convierten en los eslabones del devenir de un infante que eventualmente se hará adolescente y luego, un adulto.
Estamos seguros de que la Secundaria Montessori es exactamente el tipo de escuela que tu hijo o hija necesita. Si quieres tener más información acerca de nuestro método, habla con nosotros.